La cruzada por la espada Fain (Relato 23)

Introducción

En el mundo de Dalín se han venido suscitando acontecimientos que bien podrían presagiar el advenimiento de una amenaza como nadie ha vivido jamás… Los animales en todo el planeta parecen inquietos, como si algo o alguien los hiciera sentir nerviosos, muchas plantas han muerto sin razón alguna, la naturaleza ha dejado de traer las estaciones con sus abrazadores climas únicamente para que todo sea cubierto por un frio solo comparable a aquel vaho de terror que trae la muerte.



Aldea de Rinelum

Figuras borrosas y sombrías se acercan abroncando palabras entre mezcladas unas con las otras, provocando lamentos difícilmente entendibles pero no por eso menos angustiosos.

Todo lo que se puede vislumbrar es una masa borrosa de colores rojo y amarillo tan solo acompañada por un aroma a sangre, azufre y metal incinerado. De pronto los sentidos comienzan a agudizarse lentamente para dar paso a una figura horrorosa en medio de dicha masa de colores; Un ser alto con cabello magenta que al esbozar una pequeña sonrisa evoca unas palabras tan deleznables como atemorizantes…

????? – El volverá….

Yura abre sus ojos de golpe al tiempo que se levanta de la cama exaltada después de exhalar violentamente producto del terror que trajo consigo aquel mal sueño o recuerdo.

Al tiempo que el resplandor del sol se asoma por el oriente, toma un baño en el rio y comienza su entrenamiento con su maestro Edniar quien la ha venido adiestrando desde que sus padres fueron asesinados en la última guerra contra el reino de Faindanus.

En un círculo de 30 metros rodeado por rocas esculpidas que apuntan al firmamento Yura toma posición para atacar a su contrincante, es una posición de artes marciales milenarias cuyo recuerdo de su origen ha sido arrastrado por los vientos del tiempo pero que trascendió lo suficiente como para que algunos elegidos puedan utilizarlo. Este arte marcial no tiene nombre actualmente pero eso pierde relevancia cuando es usado en el campo de batalla, y así sucede en este momento…

Yura da un salto con todas sus fuerzas alcanzando 8 metros de altura y logrando posicionarse exactamente sobre su oponente, acto seguido su cuerpo empieza a dar botes a medida que desciende hasta crear prácticamente una rueda con su propio cuerpo. Al llegar a su objetivo su pierna derecha en posición firme sale con su talón apuntando a Edniar quien de un salto hacia atrás es capaz de esquivar el mortífero golpe, Yura salta para salir del cráter de 3 metros de profundidad que produjo su patada y vuelve a atacar. Esta vez es su puño derecho el que intenta encontrarse con el rostro de su contrincante pero éste, de un movimiento extraordinariamente raudo logra encerrar el puño con su mano izquierda al tiempo que responde con una patada producida por su pierna izquierda en el estómago de la feroz guerrera quien sale expulsada 5 metros hacia atrás pero debido a su pericia es capaz de caer en cunclillas y regresar a su posición de ataque.

Yura jamás ha conseguido derrotar a su maestro y debido a que este acontecimiento culminará su entrenamiento ella coloca todo su empeño en cada combate que sostiene con Edniar, así que pese al agotamiento en un rápido movimiento salta poderosamente hacia este y como si quisiese hacer estremecer la tierra Yura libera una enérgica patada con su pierna derecha la cual va dirigida al rostro de su maestro quien no tiene este título por mera casualidad y lo demuestra esquivando el ataque al lanzar su cuerpo hacia atrás al tiempo que con el impulso de este movimiento asesta una patada a su discípula y rival quien gracias a la fuerza de su propio ataque pierde el control de su cuerpo y es elevada debido al gran poder desplegado en el ataque de su maestro.

Yura intenta tomar posición de defensa en el aire pero no solo su cuerpo deja de responder sino que su vista se torna borrosa aumentando su confusión y después de ascender más de 10 metros solo queda descender con el triple de velocidad así que solo queda una opción.
Yura  - Air Flaicus!
Al liberar estas palabras el cuerpo de la guerrera detiene su marcha y como una nube queda suspendida en el aire ante los ojos de un incrédulo pero admirado Edniar.

Edniar – Veo que aprendiste el conjuro de levitación!
Yura – No te sorprendas tanto maestro – Al tiempo que frotaba sus ojos – Todavía no he sacado mi mejor carta.

Edniar toma su posición de defensa al tiempo que el mismo entre susurros inicia la preparación de un conjuro y a su vez Yura desde el aire junta sus manos como si estuviera rezando con la particularidad de que al hacer esto un brillo rojo emerge de su cuerpo golpeado.

Yura – Rojo es sangre, Negro es noche, Calor es el fuego y Luz la estrella! Abre el portal del caos y libéralo sobre mis enemigos!

Al tiempo que Yura recita el conjuro una esfera de energía color escarlata, negro, dorado y amarillo se forma abriendo a la fuerza sus manos y obligándolas a posicionarse de tal manera que puedan soportar tanto poder…

Yura – Libérate Akai Angrep! – Al decir esto un rayo muy potente se dispara hacia Edniar quien también ha recitado su conjuro y con una última palabra lo desata – Vaniret! – Acto seguido Edniar desaparece una milésima de segundo antes de la explosión para inmediatamente aparecer detrás de Yura.

Yura – Que!?

Edniar coloca su palma derecha en la espalda de Yura – Igniz! – Seguido de estas palabras una llamarada expulsa a Yura haciéndola aterrizar violentamente contra el suelo y dejándola inconsciente.
En el país de Verailar justo al extremo norte del continente Obe se tiene la tradición de que cada aspirante a guerrero es custodiado y entrenado por un tutor hasta la edad adulta para unirse al ejercito del reino en la primera fila de combate como carne de cañón, sin embargo el requisito para dejar de ser un aprendiz y trascender a nivel de soldado es derrotar  al maestro en un combate sin armas. Sin este requisito cumplido los aprendices no solo deben continuar su entrenamiento sin posibilidad de servir como soldados sino que no tienen permitido abandonar el país bajo ninguna circunstancia. 
Yura sabe esto, sin embargo, a pesar del malestar que pueda provocarle el hecho de ser utilizada como un escudo de carne y hueso, más importante para ella es saber su origen ya que este es totalmente desconocido para ella y para los habitantes del pueblo de Aricarde, el más grande y próspero en el reino de Verailar. 

Con la ascensión de la luna llena sobre el valle Yura vuelve a despertar con la misma exaltación con la que lo había hecho 16 horas antes en su habitación.

Yura – Me derrotó otra vez…

En ese instante Edniar entró en la habitación – Me tenías algo preocupado niña – Yura agachó su cabeza en símbolo de vergüenza…

Yura – Pensé que hoy sería…
Edniar – Oye no te apresures! Tu progreso ha sido admirable. Ustedes los elfos oscuros son bastante capaces.
Yura – Sabes que no soy un elfo oscuro, de serlo probablemente te habría vencido.
Edniar -  No eres el primer elfo oscuro con el que tengo la oportunidad de combatir y puedo decirte que no hay mucho que puedas envidiarles.

Yura se sorprende al escuchar esto – Has combatido contra otros elfos? Por qué no me lo habías contado?

Edniar – Aun no estas lista chiquilla, y aun no estas lista para abandonar la isla
Yura – Que!? Pero tú sabes que necesito salir de aquí! Necesito buscar mi origen!!!
Edniar – PRECISAMENTE!!! No tienes ni idea de los peligros que hay allá afuera y con todo lo que ha venido pasando en Dalín no han hecho más que intensificarse! 
Yura solo gira su cabeza con decepción e incertidumbre…
Edniar – En el momento que puedas derrotarme podrás abandonar la isla, ahora descansa, mañana continuaremos con el entrenamiento.

Edniar abandona la habitación al tiempo que murmura para sí mismo – Estas muy cerca Yura.
Rinelum al amanecer:

Yura de nueva cuenta despierta de un salto pero esta vez la diferencia reside en que esta reacción no fue producida por su ya habitual mal sueño ni mucho menos sino por un estruendoso ruido en alguna parte de la aldea, no muy lejos de la casa de Yura.

Yura – Pero que pasa!? – en ese momento asoma medio cuerpo por la ventana para poder ver claramente lo que estaba pasando en la aldea, sin embargo solo se podía distinguir el humo entre las casas.

????? – Quiero que traigan todo lo que puedan! Comida, mujeres, animales y armas! Al que se resista tájenlo!

Yura se armó con su espada corta, su escudo y su valor para salir de su casa a defender su pueblo de lo que fuera que estuviera interrumpiendo su paz, pero no solo ira sino también sorpresa invade el pecho de la chica al ver que aquellos que aterrorizan su aldea son simples y vulgares saqueadores, algo muy extraño teniendo en cuenta que Aricarde es una ciudad de las más prosperas del reino de Verailar así que la pobreza no es un problema.

Uno de los saqueadores toma a una mujercita de escasos 13 años y la arrastra a un rincón oscuro del pueblo – Hace mucho que no tengo algo de diversión- al tiempo que baja sus pantalones ante la mirada aterrorizada de la chica pero en menos de un segundo es fuertemente golpeado en la cabeza y expulsado al lago que cruza el pueblo.

Yura – Estas bien Mare?
Mare – Si, muchas gracias Yura!
Yura – Ve a esconderte
Mare – Se pondrá peligroso?
Yura – Si, pero no para nosotros!

Al decir esto con resolución Yura corre con la intención de detener la amenaza y sin ningún tipo de vacilación derriba a cinco de los vulgares saqueadores con un ataque rápido para inmediatamente saltar a los techos de las casas con el fin de ubicar al resto de la pandilla, sin embargo la gran mayoría de los delincuentes ya han sido reducidos por los otros aspirantes a guerreros dejando únicamente al líder, quien emprende la huida.

Yura – Ahí esta! – Saltando de lo alto de una casa, deja que su cuerpo caiga con fuerza y asesta una patada violenta al brazo del líder, fracturándolo y debido al impulso lanzando al hombre contra un muro.

El saqueador recobra el sentido de la orientación e intenta reincorporarse pero antes de que pueda hacer algún movimiento la punta de una espada corta ya está a menos de un milímetro de su garganta.
Yura – Que hacen aquí? Nuestro pueblo no tiene asuntos con ustedes!

Malp – Solo necesitábamos provisiones, nuestra intención era tomar lo que necesitáramos y salir.
De inmediato una patada se deja caer sobre el estómago del hombre…

Yura – Necesitaban mujeres para su viaje?! De inmediato asesta otra patada en el rostro
Malp – lo sentí…- Ahora un puño
Yura – Me dirás tu nombre y tus asuntos en este pueblo! Dependiendo de tu respuesta puede que te mate.
Malp – Mi nombre es Malp y estamos escapando-  Yura asesta una patada que hace salir un diente con una estela de sangre siguiéndolo – Quien dijo que podías parar?! – Malp coloca sus dos palmas al frente de el en dirección a Yura mientras asiente – Uggg! Estamos escapando de un hombre al que robamos sin saber quién era, él nos ha seguido el rastro todo este tiempo y en cualquier momento puede llegar a  esta aldea…
Yura - Que le robaste?
Malp – Esto…- Saca del interior de su andrajosa vestidura un medallón en forma de espada y Yura al ver esto es atacada repetidamente por imágenes de Elfos, caballos, palacios y lagos. Las imágenes llegan cada vez más violentamente aturdiendo a la chica abriendo una brecha para que el saqueador Malp escape… O ataque – Te destrozare perra- de una patada en el estómago derriba a la aturdida elfo dejándola a su merced para que pueda terminar sin aparente esfuerzo.

Con una sonrisa morbosa en su asqueroso rostro Malp se arma con un cuchillo oxidado y lentamente se acerca a Yura quien está inconsciente por el shock que sufrió. 

Malp – Esto es por mi brazo – Alza su mano para dejarla caer con el cuchillo pero un resplandor violeta cercena su cabeza a tanta velocidad que es casi imperceptible.  

Entre gritos y lamentos está una pequeña elfo cubierta de sangre viendo como un hombre cruelmente asesina a los miembros de su villa. Uno a uno los acaba sin ningún esfuerzo ante la mirada horrorizada de esta niña que no puede hacer más que  esperar su turno. El hombre que ha destruido su vida camina de entre llamas portando una armadura negra cubierta de sangre, con una sonrisa de satisfacción en su rostro y justo antes de asestarle un golpe en la cabeza a la elfo indefensa de su boca salen las palabras – El Volverá…

Yura abre los ojos con un sobresalto para ver a este mismo hombre al frente suyo, pero esta vez no es un recuerdo o un sueño; es la realidad.

Yura – Nodraga – El hombre al frente la había ignorado hasta el momento dado el hecho que solo quería el medallón de espada de Malp no obstante al escuchar su nombre no pudo evitar dirigir sus ojos hacia la persona que lo conocía.

Nodraga – Quien eres? Por qué me conoces?
Yura – El volverá- Al tiempo que toma guardia.

Nodraga dirige su mirada hacia el suelo por un momento hasta que los recuerdos llegan a su mente y levemente abre sus ojos – La chiquilla… Eres más fuerte de lo que creía..

Yura – Cállate! Te voy a cortar en dos!
Nodraga – Y como piensas hacer eso? – Al tiempo miles de seres con rasgos de murciélago aparecen en toda la aldea ante la mirada sorprendida de Yura –No pensaras que un ser superior como yo me ensuciaría las manos con seres inferiores – Yura salta hacia atrás ejecutando un giro en el aire que termina con sus pies apoyados en un muro del cual se impulsa a toda velocidad para cortar a estos repulsivos seres. 

Repitiendo este ataque de manera consecutiva los seres son destruidos uno a uno pero casi al instante reaparecen más de la nada…

Nodraga – No pierdas tun tiempo – Estos seres son creados por mi voluntad, mientras yo esté aquí ellos no desaparecerán.

Yura – Entonces todo lo que tengo que hacer es destruirte!- Al gritar esto, Yura salta y desciende apuntando una estocada  a Nodraga quien expulsando una ráfaga de energía purpura golpea su cuerpo fuertemente y lo repele haciéndolo aterrizar violentamente en el techo de una casa.

Nodraga – Con esos ataques no serás capaz de tocarme.
Yura – El destruyó mi aldea, Asesino a mi familia… No lo dejaré escapar.
Nodraga apunta la palma de su mano hacia la herida guerrera pero justo antes de disparar otra ráfaga de energía su mano es golpeada por un conjuro – Yura!!!
Yura – Maestro! – Al ver arribar a Edniar al lugar de la batalla se deja caer del techo hacia el suelo ya que no cuenta con mucha energía para mantenerse en pie.

Edniar y Nodraga inician un feroz combate con movimientos veloces en el aire que generan explosiones por toda la aldea. Hay un gran intercambio de conjuros, golpes, cortes y explosiones que estremecen hasta el último rincón de Aricarde, razón por la cual las personas de aldeas cercanas, intrigadas y angustiadas empiezan a acercarse a Rinelum; entre ellas se encuentra una misteriosa figura cubierta con una capa…

Rinelum

Puño contra puño, patada contra patada y magia contra magia. La batalla entre estos dos guerreros parece no tener fin, sin embargo Edniar ha estado susurrando un conjuro para terminar con su adversario…

Nodraga – Desapareció!!! – Edniar aparece detrás de su contrincante y colocando la palma de la mano sobre su espalda libera un fuerte grito de guerra –Titán Iigniz – En menos de un segundo una llamarada comparable a un dragón surcando los cielos es liberada empujando a Nodraga hacia el suelo en donde termina por colisionar y producir una gran explosión que destruye de nuevo a los seres oscuros.

Yura – Maestro! – Edniar corre para socorrer a su aprendiz pero su paso es interrumpido por una carcajada.
????? – jajajajajajajajajaja! Pensaste que algo así acabaría conmigo? – En ese momento varios halos de luz purpura emergieron del suelo que pisaba Edniar y un gran ataque en forma de una columna de luz lo embistió…

Yura sorprendida solo puede ver como este demonio se reincorpora con solo algunos rasguños menores y su armadura intacta.

Nodraga – Esto fue divertido pero es hora de acabar. Los destruiré a todos y traeré de vuelta al legendario “Zwart” con esta espa… Donde esta?! DONDE ESTA?!

El ataque de Edniar había provocado que el medallón también volara lejos, aunque no tanto como para que Yura pueda distinguirlo entre los escombros – Hablas de esta espada? – Nodraga la miró con ira – Suelta eso en este instante! – Y levanta su mano creando una esfera de energía purpura para destruir a una débil guerrera quien como último recurso apela a agitar el medallón – Vamos! 

Funciona! – Pero no logra nada con esto.
Nodraga – Esta vez me aseguraré de explotar tu cuerpo entero, así no volverás a molestarme – Mientras intenta liberar un conjuro poderoso pero de pronto…
????? – Espera! – un rayo dorado golpea la mano de Nodraga quien al girar su cabeza distingue una figura cubierta por una capa.
Nodraga – Mas Basura?
????? – Lárgate de este lugar si no quieres morir! – Muere! – Nodraga deja escapar de su mano un conjuro cuyo objetivo es destruir por completo a su recién aparecido contrincante y crea una gran explosión cubriendo todo con una cortina de humo.
????? – Sangre!
Yura – mm????
????? – Debes verter tu sangre sobre la espada – Nodraga también está escuchando esto y con su propia energía disipa la cortina de humo – No creas que te dejaré hacer eso! – Pero para cuando el violento demonio emprende su ataque Yura ya ha dejado caer algunas gotas de su sangre sobre el medallón que libera un  brillo escarlata.

Entre dicho brillo color escarlata intenso Yura advierte que la persona que acaba de salvar su vida no es nada más que otra guerrera elfo equipada con una imponente armadura color rosa, luciendo una cabellera rubia y armada de una espada dorada con su hoja negra y un brillo intenso dorado.
????? – Muy bien! Yo pondré de mi parte – Mientras se nutre con la energía de la espada – Debes atacar tú también! – Al percatarse, el medallón que Yura sostiene en sus manos es ahora una espada imponente y majestuosa…

Nodraga reúne su poder para atacar a las dos elfos quienes toman posición cada una a un lado del guerrero oscuro y debido a los tres poderes todo y todos los que están en la aldea de Rinelum sienten la presión y el advenimiento de lo que podría ser un cataclismo…

Nodraga – Muy bien …
????? – TOMA ESTO!!!
Yura -  Esto es por mi maestro… IGNIIIIIIZZZZ!!!!!!!
Los ataques combinados de las elfos chocan contra un campo mágico producido por Nodraga quien con dificultad logra resistir.
????? – Necesitamos más poder!
Yura – Siento que me debilito…

Podría ser un minuto pero para quienes combaten es una eternidad…
Edniar despierta debido a la expulsión de energía y malherido se reincorpora para observar con inquietud el choque de estos tres devastadores ataques.

Edniar – Están nivelados, pero si no hago algo ellas terminaran por ceder.
Edniar eleva su dedo índice al firmamento y brama – Dreivan!!!!- Al instante un vortex nace en medio del cielo de donde emerge una criatura parecida a un Dragón bípedo de color azul claro, ojos rojos y garras filosas.

Edniar – Ataca!!! – En ese instante Dreivan libera de sus fauces una esfera de energía azul cuyo impacto en Nodraga genera una explosión tan devastadora que muchas de las viviendas de los lugareños literalmente se desintegran y todo lo que está en un radio de 800 metros es expulsado por la onda expansiva.

Tres días después Yura despierta en una habitación de hospital…
Yura – Qué paso?  Desplazando la mirada por la habitación ésta se encuentra con un herido Edniar descansando sobre una de las camas.
Edniar – Por fin despiertas!
Yura – Que pasó con Nodraga?
Edniar – …………..
Yura – Maestro…
Edniar – Nuestro poder combinado lo afectó bastante, pero no fue suficiente… Logró escapar.
Yura mostró una mirada de resolución en su rostro – Ya veo…
Edniar – Tu no vas a ir a buscarlo!
Yura – No te preocupes, quiero recuperarme y terminar mi entrenamiento primero.
Edniar al escuchar esto dejo caer su cabeza sobre la almohada – Por lo menos tendré la tranquilidad de tenerte cerca.
Yura – Por cierto! Que pasó con esa guerrera que nos salvó?
Edniar – No sé realmente. Cuando desperté ella ya no estaba. Simplemente desapareció sin dejar rastro.
Yura – Y el medallón de espada?
Edniar – Desapareció junto con ella.
Yura – No puede ser – al tiempo que coloca sus pies sobre el suelo para intentar incorporarse.
Edniar – A dónde vas? 
Yura – Solo quiero analizar lo que sucedió.

Caminando erráticamente Yura sale de su habitación y después de algunos tropiezos consigue salir del hospital – Lo siento maestro pero me voy – e inicia su marcha para encontrar o recuperar lo que le fue arrebatado por este demonio.

Tan solo una hora después la guerrera elfo con determinación y muchas heridas cruza las puertas de la aldea Rinelum o lo que queda de ella, pero el viaje no puede comenzar sin antes encarar a la persona que la espera justo unos metros más adelante.

????? – Pensé que tal vez las heridas serian demasiado para ti.
Yura – No importa, me recuperaré en el camino.
????? – Muy bien! Puedes considerarme tu apoyo.
Yura – Por qué? Por qué nos salvaste’ Porque te quedaste para pelear?
????? – No muchas personas son dignas de blandir las espadas hermanas.
Yura – Espadas hermanas?

La guerrera elfo lanza el medallón de espada con la intención de que Yura lo tenga – Toma, a partir de este día esta será tu espada- Yura recibe con algo de asombro el pendiente – Por qué me das esto así como así? – Ya te lo dije, no cualquiera es digno de portar estas espadas. Honestamente mi intención era apoderarme de este medallón pero veo que contigo no está en manos equivocadas – Yura nota con asombro un brillo escarlata emanado del medallón.

????? – Tu espada hace resonancia con la mía, eso significa que ha encontrado a su hermana y ambas tienen el poder de pelear juntas.
Yura – Siento que tengo más fuerza! Siento que me recupero.
????? – Hacer un pacto de sangre con la espada no es suficiente, se necesita la sangre de un guerrero para despertar estas espadas y como la tuya te ha reconocido como uno está brindándote de su propia energía. Ahora ustedes dos son uno.
Yura – Muy bien! Todo sea por erradicar el mal de Dalín!
????? – Escuchar eso me conforta! Debemos movernos rápido! Esta batalla que estamos a punto de librar es mucho más grande de lo que piensas.
Yura – Esta batalla tiene algo que ver con las palabra de Nodraga?
????? – Qué palabras?
Yura – El volverá…
????? – Si el pronunció esas palabras es porque definitivamente la guerra es un hecho. Debemos movernos rápido porque hay un demonio legendario entrando a nuestro plano mientras hablamos.
Yura – Como sabes tanto? Quién eres?
????? – Solo te diré que somos soldados en una batalla que inició hace miles de años, en el camino te enterarás de lo que necesites saber.

Al tiempo que cuelga el medallón de su cuello Yura asiente con decisión – Está bien! Vámonos.
Ambas emprenden su viaje con mucha incertidumbre por el futuro del planeta y sus habitantes pero con muchas esperanzas de no ser los únicos soldados en la guerra que está por venir.

????? – Por cierto. Mi nombre es Sayara, y el tuyo?

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Escrito por: Norman Leguizamon
Arte: Norman Leguizamon (Galería en Deviantart)





1 comentario:

  1. Lo dicho, te quedo guapísimo el dibujo. Está muy bueno, y como te dije, la morena está más hermosa que la rubia

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